Rosario Central nació en Argentina.
El Club Atlético Rosario Central, conocido simplemente como Rosario Central, Rosario o Central, es una entidad deportiva argentina de la ciudad de Rosario, en la provincia de Santa Fe, cuya principal actividad es el fútbol masculino, en el que participa de la Primera División de Argentina. Es propietario del Estadio Gigante de Arroyito.
En la institución también se practican otras disciplinas, como fútbol femenino (en la que disputa también el respectivo certamen de Primera División), hockey sobre césped, baloncesto, patinaje, boxeo, taekwondo, fútsal, fútbol playa y voleibol, entre otros.
En el año 1905 —con la fundación de la Liga Rosarina de Fútbol— el club finalmente pudo desarrollar su actividad principal. De la misma, se separó en dos ocasiones: la primera en 1913 en donde participó de la disidente Federación Rosarina de Football, mientras que la segunda fue entre 1920 y 1921 en donde fue parte de la también disidente Asociación Amateurs Rosarina de Football. Entre 1931 y 1938 fue miembro de la Asociación Rosarina de Fútbol, donde disputó sus primeros campeonatos profesionales. Entre estos tres períodos, que van desde 1905 hasta 1938, Rosario Central totalizó quince campeonatos locales, siete copas rosarinas oficiales y cinco copas nacionales oficiales de la AFA.
Si bien durante toda la era amateur y profesional rosarina (1905-1938) el club participó activamente de las Copas nacionales oficiales organizadas por las asociaciones antecesoras a la AFA, recién a partir de 1939 se incorporó definitivamente al Campeonato de Liga profesional regular de Primera División organizado por el ente rector del fútbol argentino, en donde se consagró campeón en cuatro oportunidades. Además es el primer equipo del interior en ser campeón y subcampeón en torneos nacionales de liga, y el primero del interior del país en ganar una Copa Argentina.
A nivel internacional obtuvo una vez la Copa Conmebol (torneo oficial precursor de la actual Copa Sudamericana) y alcanzó la final de la misma copa en otra oportunidad. Este logro lo convierte en el único equipo de la provincia de Santa Fe que conquistó un título internacional oficial organizado por la Confederación Sudamericana de Fútbol. Con 23 participaciones oficiales en torneos internacionales organizados por la Conmebol Rosario Central es el octavo club argentino con más participaciones internacionales oficiales, siendo el mejor club del interior del país ubicado en ese rubro. Además, al día de hoy, lleva 12 participaciones en la Copa Libertadores de América, en donde fue dos veces semifinalista.
Cuenta con diez títulos nacionales —5 en el profesionalismo y 5 en el amateurismo—, y uno internacional oficial en su haber. Esto lo coloca como el equipo del interior del país con más logros oficiales obtenidos, ubicándose décimo en la sumatoria total de títulos oficiales en la historia del fútbol argentino. Además, Central es el único equipo del interior del país que posee títulos de Primera división de Liga nacional de AFA, de Copa nacional de AFA, y de Copa internacional de la Confederación Sudamericana de Fútbol. Ningún otro club por fuera del Gran Buenos Aires y La Plata posee logros oficiales en todos estos ítems.
Su clásico rival es el Club Atlético Newell's Old Boys, identificado con el Parque Independencia de la ciudad de Rosario, con quien disputa el Clásico rosarino.
Rosario Central es uno de los clubes que reivindica ser uno de los grandes del fútbol argentino. Desde 2012 integra, junto a otros 10 equipos, la galería de «clubes clásicos de la FIFA» para el fútbol argentino, como uno de los equipos más tradicionales y representativos del país.
Una parte de sus instalaciones se encuentran ubicadas en la ciudad de Rosario, en el barrio de Arroyito, aunque posee otros predios en distintas zonas de la ciudad y dos complejos deportivos ubicados en dos localidades aledañas a Rosario: uno en la ciudad de Granadero Baigorria y el otro en la ciudad de Arroyo Seco. Además, el club posee una gran cantidad de filiales en distintos lugares de Argentina y el mundo.
En la víspera de la Navidad de 1889 un grupo de personas Ferrocarril Central Argentino de Rosario se reunieron con la intención de crear un club de fútbol. El inglés Thomas Mutton propuso la creación del equipo, con nombre «Central Argentine Railway Athletic Club». Los asistentes dieron su aprobación, y eligieron como presidente al escocés Colin Bain Calder. Se nombró vicepresidente al a Thomas Hooper y a C. Chamberlain como secretario.
Solo podían ser socios los empleados del ferrocarril, y la primera cancha se ubicó en los terrenos de la estación. Un vagón en desuso fue utilizado como sede, y en los días de partidos como vestuario y hasta de tribuna por los espectadores.
En 1890 un grupo de marineros británicos aceptó enfrentar al equipo, y en la hoy bajada Sargento Cabral se jugó el primer encuentro, con resultado 1 a 1. Formaron ese día M. Barton; Postell y Camp; J. Muskett, J. Barton y King; McLean, T. Muskett, Miguel Green, McIntock y Henry Hooper.
En 1903 en una asamblea extraordinaria se cambió el estatuto a petición del delantero Miguel Green, permitiendo el ingreso como socio del club a todas aquellas personas que quisieran serlo. Al poco tiempo de aprobarse el cambio el club comenzó a recibir como socios a obreros y trabajadores. Además, la institución rosarina cambió de nombre al definitivo y actual en español: Club Atlético Rosario Central.
En 1913 Rosario Central se alzó con el título de la Federación Rosarina de Football y también con la Copa de Competencia de la Federación Argentina de Football. Posteriormente, entre 1914 y 1917, logró el tetracampeonato rosarino obtenido en fila, sumado también a otras tres copas nacionales oficiales de AFA que Central obtuvo entre 1915 y 1916. En esas cinco temporadas (1913-1917), el club ganó cinco títulos locales consecutivos y cuatro copas nacionales. A raíz de estos resultados, se comenzó decir que el equipo rosarino «daba cátedras de fútbol» y se lo comparó con el Racing Club de Avellaneda; club que prevalecía en Buenos Aires en aquel tiempo y recibía el mote de «La Academia». De esta manera surgió uno de los apodos que quedarían marcados para siempre en el devenir histórico del equipo centralista: «La Academia rosarina».
El origen del apodo «Canallas» es incierto, ya que hay numerosas versiones. La más difundida comenta que debido a la negativa a participar en la década de 1920 en cierto partido a beneficio del Patronato de Leprosos frente a su clásico rival, Newell's Old Boys, los seguidores de este estigmatizaron la negativa con el insulto: «¡Canallas!», lo que llevó a los centralistas a endilgar a sus rivales con el contra-insulto: «¡Leprosos!»
Existe una versión que se basa en el contexto social de la época: el colegio de Newell's se encontraba cercado por alto muros, para evitar que mirara la gente desde afuera. La imaginería popular ideó que aquello parecía un leprosario, ya que a los enfermos por esta dolencia se los aislaba del mundo exterior. En respuesta a esta burla, los aristocráticos integrantes de Newell's insultaban a los seguidores de Central, de extracción popular, con el mote de «canallas», haciendo referencia a su pertenencia a las clases más bajas.
Al no haber una liga en la ciudad, entre 1900 y 1907 el primer equipo de Rosario Central —y el de Atlético del Rosario— participaba de la Copa de Competencia que organizaba la AFA contra clubes de Buenos Aires y Uruguay, siendo esta su primera división. El 30 de marzo de 1905 se creó la Liga Rosarina de Fútbol, asociación encargada de organizar la primera competición de la provincia, con clubes de la ciudad de Rosario. La mencionada Liga tenía como principal objetivo la organización de un torneo, y para esto se consiguió una copa donada por el intendente de Rosario, Santiago Pinasco. Luego, en su honor, la competencia se denominó «Copa Santiago Pinasco», el cual fue un campeonato de segunda división. En esta copa no podían participar aquellos jugadores que estuviesen disputado la «Copa Competencia». Esto afectó a Central, debido a que participaban con su primer equipo en esta copa nacional.
El debut de Central en la Copa Pinasco se dio el 21 de mayo al enfrentar a Atlético del Rosario a quien venció por 3 a 1. El torneo siguió en marcha, sin embargo en ese mismo año se produjo un partido que motivó a más de dos mil personas a acercarse a la plaza Jewell: el 16 de junio se enfrentó un combinado rosarino con el Nottingham Forest. En el conjunto local se encontraba Zenón Díaz; un zaguero criollo que jugaba para Rosario Central y que fue el primer «canalla» en ser convocado para jugar en la selección nacional de fútbol. El encuentro finalizó con una victoria de los ingleses de 5 a 0.
Dos días después de ese partido se jugó en el mismo lugar el primer partido de la historia contra Newell's Old Boys —del cual los jugadores del primer equipo canalla no pudieron formar parte— que los rojinegros ganaron 1 a 0. Central, que desde 1904 ya usaba su camiseta azul y amarilla a bastones verticales, fue subcampeón del primer campeonato rosarino.
El 20 de junio de 1905 se produjo el primer pase interclubes para Central. El club Argentino —actualmente Gimnasia y Esgrima de Rosario— le vendió por cinco pesos a Harry Hayes, un chico de 14 años que destacaba por ser un centrodelantero con una pegada violenta. Su debut se dio en el campeonato de tercera de 1906 cuando faltó un jugador del equipo. En su primer partido marcó 3 goles y se fue aplaudido. Hayes jugaría desde 1907 hasta 1926 en el primer equipo auriazul siendo un ícono de la historia del club en sus primeros años, junto a Zenón Díaz.
En el año 1907, teniendo en cuenta el impulso que había tomado el fútbol, la Liga Rosarina de Fútbol decidió crear una primera división, cuyo ganador representaría a Rosario en la Copa de Competencia de AFA. Así, tanto Central como Atlético del Rosario pudieron jugar con su primer equipo sin restricciones en el nuevo Campeonato de Primera creado por la Liga Rosarina. De esta manera, la Copa Santiago Pinasco continuó siendo el trofeo de la segunda división, y se creó la Copa Nicasio Vila, la cual sería entregada al ganador de la primera división. Dicha copa sería nombrada en honor al por entonces intendente de la ciudad, Nicasio Vila.
Rosario Central ganó su primer título de primera en 1908, cortando con la hegemonía que tenía Newell's Old Boys por aquellos años. El conjunto auriazul se adjudicó en forma invicta la Copa Nicasio Vila de aquel año correspondiente a la primera división. Realizó una magnífica campaña, sin fisuras, imponiéndose ante sus rivales en los diez cotejos que disputó: marcó cuarenta y ocho goles y le anotaron sólo nueve. Formaban parte del plantel Zenón Díaz, Augusto Winn, J. H. Grant, Juan Díaz, D. Mackenzie, Pedro Wilson, Charles Thompset, Francisco Recanzone, Victorino Pisso, Daniel Green, Tito Corti, Harry Hayes, Antonio Vázquez y E. Palling.
El año 1912 fue tremendamente desafortunado para el fútbol rosarino. No había prácticamente un partido que terminara normalmente: las agresiones hacia los árbitros, equipos que se iban de la cancha, y resoluciones de dudosa parcialidad emitidas por la Liga Rosarina de Fútbol provocaron un ambiente de caos que determinó la suspensión de los campeonatos.
En 1913 el club se retiró de la Liga Rosarina por desavenencias con su directiva, y junto a otros clubes, fundaron la Federación Rosarina de Football. Por ese motivo, fue —junto a los otros equipos— excluido de la Liga Rosarina de Fútbol. Ese año, el conjunto canalla se consagró campeón de la Federación Rosarina de Football, quedando Tiro Federal como escolta.
Anteriormente a la conformación de la Liga Rosarina de Fútbol los equipos de Buenos Aires se agruparon en la llamada Asociación Argentina de Football. Anualmente, la Liga Rosarina y la Asociación Argentina organizaban diferentes competiciones para enfrentar a sus equipos. Así, además de sus buenas actuaciones en la Copa Vila, Rosario Central comenzaría a lograr títulos en Copas a nivel nacional.
En 1913 —año en el que participó en la disidente Federación Rosarina— obtuvo la Copa de Competencia La Nación; un torneo organizado por la Federación Argentina de Football, la cual era una entidad disidente a la oficial (Asociación Argentina de Football). De todos modos, los torneos de Primera y de Copas nacionales organizados por las entidades disidentes a la Asociación Argentina de Football tienen carácter oficial debido a que fueron organizados por asociaciones deportivas que luego se fusionaron con las entidades que constituyen la continuidad institucional de la Asociación del Fútbol Argentino.
En semifinales del torneo, el 21 de septiembre, derrotó 2 a 1 al Club Atlético Porteño —por entonces campeón de la Federación Argentina de Football luego de ganar el título en 1912— en cancha de Independiente, con goles de Juan Sánchez y de Harry Hayes.
En la final Central le ganó a Argentino de Quilmes por 3 a 2 en cancha de GEBA con goles de Antonio Blanco, Federico Flynn, y Harry Hayes sobre el final, y logró el título de campeón. Este, sería el primer título nacional oficial de AFA en la historia del club.
Aquella tarde del 26 de octubre de 1913 Rosario Central alistaría a Serapio Acosta; Zenón Díaz e Ignacio Rota; Pablo Molina, Alberto Ledesma y Juan Díaz; Federico Flynn, Antonio Blanco, Harry Hayes, Ennis Hayes y Fidel Ramírez.
En 1914 se resolvieron los conflictos con la Liga Rosarina de Fútbol, y ambas competiciones se fusionaron. Así, Central volvió a competir en la Liga Rosarina de Fútbol, ganando el título de campeón de primera división en ese año.
El 11 de octubre de 1914, Rosario Central visitaba a Newell´s Old Boys por la penúltima fecha de la Copa Nicasio Vila de aquel año. El conjunto auriazul llevaba solo 3 puntos de ventaja sobre su clásico rival —con cuatro por jugarse—, por lo que con un empate o una victoria se aseguraría el título de campeón. Finalmente, Rosario Central ganó 5 a 0 y pudo dar la vuelta olímpica ante su clásico rival y en terreno rojinegro. Los goles del equipo «canalla» en aquella recordada jornada fueron convertidos por Harry Hayes (3), Ennis Hayes y Fidel Ramírez. Esta sería la primera vez en la historia en donde uno de los dos equipos gana un campeonato oficial en la cancha de su clásico rival.
El plantel de Rosario Central estuvo integrado por los arqueros Serapio Acosta, Juan Bruno y Crosby; los defensores Zenón Díaz e Ignacio Rota; los mediocampistas, Juan Díaz, Francisco Furlong, Pablo Molina, Eduardo Blanco y Alberto Ledesma; los delanteros, Fermín Arrieta, Mario José Barbieri, Antonio Blanco, E. Dethier, Federico Flynn, Ennis Hayes, Harry Hayes, Teófilo Pignani, Fidel Ramírez y Alfredo Woodward.
En 1914 disputó 20 encuentros, ganando 19 y empatando uno. Hizo 99 goles y le marcaron solo 10, siendo Harry Hayes el goleador del campeonato con 51 tantos.
En 1915 Central se hizo nuevamente de la Copa Vila, ganándola invicto y con extrema facilidad. Venció en 18 partidos y empató en los 2 restantes, y señaló 104 goles a favor y recibió solo 4 tantos en contra, demostrando su potencial ofensivo y su solidez defensiva.
En 1916 Rosario Central se quedó con casi todos los títulos oficiales que disputó: fue «Campeón Argentino», luego de imponerse a Racing Club de Avellaneda 3 a 1 en la final de la Copa Ibarguren, ganó el título de Primera de la Liga Rosarina de Fútbol de manera invicta, y finalizó el año venciendo en las Copas de Honor Municipalidad de Buenos Aires y de Competencia Jockey Club. En ambas, derrotó a Independiente de Avellaneda en las finales.
La Copa Dr. Carlos Ibarguren —también conocida como «Campeonato Argentino Copa Dr. Carlos Ibarguren»— fue un torneo de fútbol oficial entre clubes de la Argentina. Su nombre radica en que el trofeo fue donado en 1913 por el entonces Ministro de Instrucción Pública de la Nación, Carlos Ibarguren. Este, era un trofeo disputado por los campeones de las dos competiciones más importantes del país de aquellos años: el de la Liga de Buenos Aires y el de la Liga de Rosario. Esta copa ya se le había negado a Central en el año anterior, ya que había perdido la final contra Racing de Avellaneda en la edición de 1914.
El conjunto auriazul —por haber sido el Campeón rosarino de 1915— se ganó el derecho nuevamente de enfrentar al campeón de Buenos Aires de ese año, quien resultó ser otra vez el Racing Club. Así, llegó el segundo título nacional oficial para el club de Arroyito luego de derrotar en la final al equipo de Avellaneda, claro dominador de la liga oficial porteña por aquellos años.
El primer duelo se jugó recién en marzo de 1916 en cancha de Independiente, y terminó igualado 0 a 0, por lo que tuvieron que jugar un segundo partido de desempate. El mismo, se disputó en la cancha del Club Gimnasia y Esgrima de Buenos Aires el 30 de abril de 1916, y Central se impuso por 3 a 1 con goles de José Laiolo en 2 oportunidades y Alfredo Woodward. Los rosarinos aquella tarde formaron con Ramón Moyano; Zenón Díaz e Ignacio Rota; Ernesto Rigotti, Eduardo Blanco y Jacinto Perazzo; Mario José Barbieri, Antonio Blanco, José Laiolo, Ennis Hayes y Alfredo Woodward. Así, con el 3 a 1 final, Rosario Central se adjudicó la Copa Ibarguren y se proclamó campeón argentino de 1915.
Después de haber ganado la Copa Ibarguren llegó el turno de la Copa de Honor. Aquella competencia fue un torneo oficial organizado durante la etapa amateur por la entidad precursora de la Asociación del Fútbol Argentino, llamada Argentine Football Association hasta 1911; y Asociación Argentina de Football en la etapa posterior. Se jugaba por eliminación y participaban equipos de la Asociación y de la Liga Rosarina de fútbol.
El elenco auriazul accedió a la Copa de Honor de aquel año imponiéndose ante su clásico rival, Newell’s Old Boys, a quien goleó 8 a 0 como visitante en octavos de final. Aquel 29 de junio los goles centralistas fueron marcados a través de 3 tantos de José Laiolo, 2 de Antonio Blanco, 2 de Ennis Hayes, y 1 de Fidel Ramírez.
En cuartos de final, el 10 de septiembre, derrotó a Gimnasia y Esgrima de Rosario por 4 a 1, con goles señalados por José Laiolo en 2 oportunidades, un tanto de Harry Hayes y otro de Ennis Hayes.
En las semifinales, el 15 de octubre, el conjunto auriazul se impuso en cancha de GEBA a Argentino de Quilmes, a quien venció con un categórico marcador de 7 a 0, con tantos señalados por Ennis Hayes (4), Antonio Blanco, Harry Hayes y José Laiolo. Los once jugadores que se clasificaron finalistas fueron Ramón Moyano; Zenón Díaz e Ignacio Rota; Ernesto Rigotti, Eduardo Blanco y Jacinto Perazzo; Antonio Blanco, José Laiolo, Harry Hayes, Ennis Hayes y José Clarke.
En la final del certamen, los «canallas» se midieron a Independiente de Avellaneda en la cancha de Racing Club. En un partido reñido el equipo rosarino logró un ajustado triunfo por 1 a 0, con un tanto marcado por Ennis Hayes. Aquella tarde del 12 de noviembre de 1916 Rosario Central salió a la cancha con Guillermo Atsbury; Zenón Díaz e Ignacio Romeo Rota; Ernesto Rigotti, Eduardo Blanco y Jacinto Perazzo; Antonio Blanco, José Laiolo, Harry Hayes, Ennis Hayes y Alfredo Woodward.
Posteriormente, el hecho de ganar la final de esta Copa argentina lo habilitó a disputar la final de la Copa de Honor Cousenier frente al campeón de la Copa de Honor uruguaya, siendo vencido por Nacional de Montevideo por 6 a 1 en la final internacional.
En 1916 Central siguió dominando a nivel nacional. Además de haber ganado la Copa Ibarguren, la Copa de Honor y el campeonato de Liga, los de Arroyito obtuvieron también la Copa de Competencia Jockey Club de ese año.
En octavos de final derrotó a Belgrano de Rosario 2 a 0, y luego 3 a 0 a Gimnasia y Esgrima de la misma ciudad en cuartos de final. En semifinales el equipo auriazul venció a River Plate por 3 a 2 en cancha de G.E.R., con goles señalados por José Laiolo, Harry Hayes y Antonio Blanco.
En la final, jugada en cancha de Racing Club, los canallas doblegaron a Independiente 2 a 1 gracias a los goles de Antonio Blanco y Harry Hayes. Central formó aquella tarde del 17 de diciembre con Guillermo Niblo; Zenón Díaz e Ignacio Rota; Ernesto Rigotti, Francisco Furlong y Jacinto Perazzo, Antonio Blanco; José Laiolo, Eduardo Blanco, Harry Hayes y Ennis Hayes.
Tras coronarse en la Copa Competencia Jockey Club se midió contra Peñarol —campeón de la Copa Competencia uruguaya—, por la Copa Competencia Chevallier Boutell, cayendo derrotado por 3 a 0, en la cancha de Racing.
En 1917, Rosario Central logró el pentacampeonato rosarino obtenido en fila: en 1913 se había alzado invicto con el título de la Federación Rosarina de Football y posteriormente, entre 1914 y 1917 ganó la Copa Nicasio Vila de manera consecutiva, hecho único en el fútbol rosarino. Como dato particular, hay que decir que Rosario Central estuvo nada más y nada menos que casi 5 años sin perder un solo partido oficial por Liga rosarina. El 28 de julio de 1912 Central cayó 0-7 contra Newells y no volvió a perder un solo partido de Liga hasta el 22 de abril de ese año 1917, cuando fue derrotado 0-4 por Tiro Federal. Fueron casi 5 años sin perder, con campeonatos logrados en 1913, 1914, 1915 y 1916.
En aquel año 1917, el club de Arroyito volvió a ser campeón, pero no de manera invicta: ganó 17 partidos y cayó en solo 1 —el mencionado ante Tiro Federal—, marcando 57 goles a favor y recibiendo 13 en contra.
El detalle de aquel período invicto nunca igualado por ningún otro club de Rosario fue el siguiente:
En total fueron 69 partidos invictos por Liga, con 65 victorias y 4 empates. Es el invicto por Liga más largo de la historia del fútbol rosarino.
En 1918, Central no pudo alzarse con el hexacampeonato rosarino consecutivo y dejó el título a manos de Newell´s, que cortó la racha de logros canallas, pero en 1919 obtuvo nuevamente el título con la doble fórmula: campeón sin perder un solo encuentro. Aquel año quedó en la memoria de la historia del Clásico rosarino ya que luego de finalizar el campeonato igualados en la tabla general, los rivales de la ciudad tuvieron que disputar un encuentro final de desempate para determinar al campeón de la Primera División. El cotejo se disputó el 11 de enero de 1920 en cancha de Gimnasia y Esgrima de Rosario y fue dirigido por el árbitro británico Paddy McCarthy, enviado especialmente por la Asociación Argentina de Football. El cotejo despertó un interés enorme entre los rosarinos ya que fue presenciado por una multitud. Según el Diario La Capital de Rosario: «No cabía un alfiler. A las 16:20 se clausuraron las boleterías. Había más de 10 000 personas», lo que para la época era muchísimo público. Cuenta la crónica que esa tarde hubo tanta gente que 200 personas eligieron el techo de los vestuarios como tribuna, los tirantes cedieron y los hinchas cayeron sobre los jugadores que se cambiaban, y por milagro, todos resultaron ilesos.
El partido estaba 2 a 2 cuando fue suspendido faltando 7 minutos para el final por invasión de campo. Harry Hayes puso en ventaja a Central a los 35 minutos del primer tiempo. A los 10 del segundo tiempo Ernesto Celli igualó para Newell's, mientras que 8 minutos después el mismo Harry Hayes marcaría el 2 a 1 para el conjunto auriazul. Finalmente, en el minuto 67 Atilio Badalini estamparía el empate 2 a 2. En el minuto 83, una invasión de campo obligó al árbitro a suspender el partido. El 25 de enero se completó el cotejo, y en los 90 minutos reglamentarios el empate en 2 se mantuvo, por lo hubo que recurrir a 2 tiempos suplementarios de 30 minutos para definir al campeón. Finalmente, un gol de Jacinto Perazzo sobre el final —en el minuto 141—, le dio la festejada victoria y el título a Rosario Central. Ese partido marcó la primera final de la historia disputada entre ambos clubes rivales y fue el clásico rosarino más largo de la historia.
Como balance, la década de 1910 constituyó una época de oro para Rosario Central. El conjunto auriazul obtuvo los campeonatos en forma consecutiva de la Federación Rosarina de Football 1913, y las Copa Nicasio Vila 1914, 1915, 1916, y 1917, ostentando el récord en la Liga Rosarina de Fútbol en ser el único club de la ciudad en haber ganado 5 títulos consecutivos. Además, los canallas ganaron en esa década el título de campeón rosarino de 1919, luego de vencer en una final de desempate a Newell´s por 3 a 2. A su vez, en esos 10 años Central obtuvo sus primeros títulos nacionales oficiales, venciendo en cuatro copas nacionales de AFA.
Los problemas con la directiva de la Liga Rosarina de Fútbol volvieron a suceder en 1920. Tras disputar sólo 9 partidos en el torneo, Central retiró el equipo disconforme con el manejo de la Liga. La protesta centralista fue seguida por Gimnasia y Esgrima y Nacional, y fundaron la llamada Asociación Amateurs Rosarina de Football. A estos clubes, se unieron también Riberas del Paraná y Compañía General Buenos Aires. Así, el fútbol rosarino sufría la segunda división importante de su historia, tal como había sucedido sobre fines de 1912.
Rosario Central se alzó con los dos campeonatos de la Liga Amateurs de Football de Rosario, tanto en 1920 como en 1921.
La Copa de Competencia de la Asociación Amateurs fue un torneo oficial, disputado entre equipos del fútbol argentino, que tuvo dos versiones diferentes desde su creación.
En 1920 Rosario Central ganó su quinta corona nacional al hacerse de esta Copa. En la misma, derrotó a River Plate 2 a 0 en octavos de final, con goles de Antonio Macías y de Harry Hayes. Este duelo, se disuptó el 22 de agosto de 1920 en Rosario, en cancha de Gimnasia.
Luego, por los cuartos de final, el conjunto auriazul venció a Nacional de Rosario —hoy llamado Argentino de Rosario— por 3 a 2 actuando como visitante. Los goles de Central fueron marcados en aquella tarde del 17 de octubre por el mono Juan Francia, Ennis Hayes y Macías.
Posteriormente, en la semifinal, los rosarinos batieron al Club Atlético San Isidro 2 a 0 en cancha de GER, el 14 de noviembre. A los 30 minutos el juez Ormando Baglietto sancionó penal para Central, y fue convertido por Florencio Sarasíbar. A los 69 minutos llegaría el segundo tanto por intermedio de Guaraglia, y así Central afianzaba su clasificación a la final.
En la final del campeonato Rosario Central doblegó 2 a 0 a Almagro, equipo que —contra todos los pronósticos— había dejado en el camino a Racing Club en la otra semifinal. El cotejo decisivo fue disputado en cancha de GEBA, Buenos Aires. Los goles del conjunto auriazul fueron marcados por Harry Hayes a los 7 minutos del primer tiempo, y por Antonio Macías a los 30 del segundo tiempo. Aquella tarde del 12 de diciembre de 1920, Rosario Central ganaría su quinto título nacional oficial, y salía a la cancha con Vicente Pugliese; Patricio Clarke y Florencio Sarasíbar; José Pignani, José Fioroni y Jacinto Perazzo; Antonio Macías, Juan Francia, Harry Hayes, Ennis Hayes y Enrique Tami.
Luego de dos años de conflictos se solucionaron los problemas, y tanto Central como el resto de los equipos disidentes volvieron a participar en el campeonato oficial de la Liga Rosarina de 1922, disolviéndose así la Asociación Amateurs. En aquel año los auriazules no tuvieron una gran campaña y finalizaron en la 4.ª posición del torneo de Liga, aunque el torneo duró solo la mitad de partidos —solo 15— que inicialmente estaban estipulados (30).
Ante el prematuro cierre de la Copa Vila, la Liga Rosarina de Fútbol decidió completar la temporada poniendo en juego otra copa oficial, llamada Estímulo, la cual se jugaría desde septiembre hasta fines de noviembre de ese año. Los equipos participantes de la primera división se dividieron en dos grupos y los mejores clasificados pasarían a una ronda final por el título. Así, a pesar de la pobre performance realizada por Central en el Campeonato de Liga de aquel año, los canallas ganaron su grupo y llegaron a la final del torneo de Copa. En la misma, los auriazules derrotaron 1 a 0 a Tiro Federal con gol de Ennis Hayes a los 44 minutos del primer tiempo y obtuvieron así un nuevo lauro oficial en su historia.
En 1923, el club remodeló su cancha —ubicada en el Cruce Alberdi—, denominada Parada Castellanos. La comisión directiva convenció al Ferrocarril para que le donara toda la madera que la empresa no utilizaba. De esta forma el señor M. F. Ryan –un alto funcionario de la Empresa– facilitó el material y ayudó a que el club contratara a unos cuantos peones para empezar a construir tribunas. Con el auxilio de cientos de socios alzaron dos tribunas a cada lado de la cancha, de cien metros de gradas con diez escalones. A partir de ese momento, el estadio llegó a tener una capacidad de unas 15 000 personas, aproximadamente. El gasto fue de aproximadamente 16 000 pesos de aquella época.
En lo futbolístico, el club de Arroyito obtuvo el título local de la Copa Nicasio Vila de ese año. Central ganó el campeonato invicto y de punta a punta, con 27 victorias y solo un empate, marcando 93 goles a favor y recibiendo solo 12 en contra, siendo Ennis Hayes y Juan Francia los máximos goleadores.
En 1925, el club se independizó definitivamente del Ferrocarril, por lo que este le quitó el terreno en donde estaba ubicada su ya tradicional cancha de la Parada Castellanos. Así, los auriazules tuvieron que buscar un lugar propio para construir su estadio. Mientras tanto, en ese año Central hizo de local en la cancha del Club Bolsa de Comercio. Sobre fines de 1925, el club logró la concesión municipal de los terrenos en donde se encuentra actualmente —ubicados en la intersección de Av. Génova y Av. Cordiviola—, por lo que comenzó a construir su nuevo estadio allí, y nunca más los abandonó.
El primer partido en su nueva cancha ubicada en al barrio de Arroyito fue en un clásico rosarino ante Newell's, el 14 de noviembre de 1926, correspondiente a la fecha 27 de la Copa Nicasio Vila —primera división del fútbol de Rosario— de aquel año. El cotejo finalizó con victoria de Central por 4 a 2, con goles señalados por Florencio Sarasíbar de penal, Castagno en contra de su propia valla, y 2 tantos de Armando Bertei para Central. Aquella tarde, el equipo auriazul alistó a Octavio Díaz, Florencio Sarasíbar, y Francisco De Cicco; Félix Sarasíbar, José Fioroni, y Fernando Fajardo; Antonio Macías, Arístides Ongano, Armando Bertei, Atilio Coirini y Esteban Indaco.
En lo deportivo, luego de cuatro años «en blanco» donde el fútbol rosarino fue dominado por Tiro Federal y Belgrano, Rosario Central repitió un nuevo logro de campeón en 1927. Con un plantel renovado y ya sin Harry Hayes, goleador histórico y buque insignia auariazul retirado en 1926, la figura de Luis Indaco se agigantó. Aquel año los canallas ganaron el título rosarino de punta a punta: vencieron en 14 partidos y perdieron solo 1, anotando 42 goles a favor y recibiendo solo 6 en contra.
En cuanto a lo institucional, el 1 de diciembre de 1927 la Municipalidad de Rosario le concedió el terreno de la avenida Génova y Cordiviola —en donde el club ya tenía construido el estadio desde 1926— por el término de 20 años. Durante ese año se inició la obra para la construcción de la tribuna oficial —hecha de cemento—, con capacidad para 7000 espectadores. Entre 1927 y 1929 el equipo siguió jugando en su estadio de Génova y Cordiviola mientras paralelamente se terminaba de construir toda la tribuna popular, la cual sería también totalmente de cemento. Una vez terminada la obra, la capacidad del estadio pasó a ser para algo más de 36 000 espectadores.
En 1928 se jugó la tercera final en la historia entre Central y Newell's. Tal como había sucedido en 1919, Rosario Central y su clásico rival volvieron a quedar igualados en la tabla general de la Copa Nicasio Vila de ese año y debieron disputar un encuentro de desempate para decidir al campeón. El partido se disputó en el estadio de Newell´s, y Rosario Central se impuso por 1 a 0 con gol de José Podestá de tiro libre a los 42 minutos del primer tiempo. Así, volvió a obtener el campeonato ante su eterno rival, dando la vuelta olímpica en terreno rojinegro. Los hinchas canallas se hicieron del botín derecho del goleador y lo utilizaron como estandarte en los festejos por el campeonato logrado en el reducto de su clásico rival.
El equipo canalla aquella tarde formó con Octavio Díaz; Ernesto Cordones y Francisco De Cicco; Arturo Podestá, José Fioroni, Félix Romano; Ricardo Reol, Armando Bertei, José Podestá, Jacinto Retto y Antonio Miguel.
El 27 de octubre de 1929 todo quedó listo, y se inauguró el nuevo estadio completo con todas sus tribunas de cemento, en un encuentro amistoso ante Peñarol de Montevideo, que finalizó en empate 2 a 2. Rosario Central formó aquel día con Octavio Díaz; Francisco De Cicco y Juan González; Arturo Podestá, Juárez y Félix Romano; Vázquez, Gerardo Rivas, Marcelo Tamalet, Luis Indaco y Nazareno Luna. Los tantos canallas fueron convertidos por Tamalet y Vázquez. El estadio pasó a tener una capacidad de alrededor de 35 000 espectadores.
En 1930 Rosario Central logró otro título de Primera en la Copa Vila, ostentando así el récord de 10 consagraciones en dicho torneo, siendo el club que más veces lo obtuvo. De la mano del ahora entrenador Eduardo Blanco —una ex gloria del club en sus tiempos de jugador auriazul— y con Luis Indaco como figura y goleador en el ataque (once tantos), el quite, la lucha y también el poder de gol de Teófilo Juárez en el mediocampo, y la seguridad de Octavio Díaz en el arco, Rosario Central ganó una nueva estrella en su palmarés. El conjunto auriazul obtuvo la victoria en 17 partidos, empató en 4 y cayó en 1 oportunidad.
El balance que dejó la era amateur rosarina (1905-1930) fueron cinco títulos nacionales oficiales de A.F.A. , trece Ligas rosarinas de primera división y cinco copas oficiales rosarinas, siendo así el equipo de la ciudad de Rosario que más logros obtuvo en ese lapso.
En el año 1931 el fútbol argentino sufrió una gran transformación. Si bien desde hacía muchos años estaba generalizado que los jugadores cobraran una remuneración por su actividad —de una manera cada vez menos encubierta—, en lo que dio en llamarse el amateurismo marrón, recién en 1931 se terminó oficialmente con la era amateur del fútbol argentino, y comenzó la era profesional. Así, todos los futbolistas comenzaron a cobrar un salario y a firmar contratos por jugar en los equipos de manera rentada. De esta forma, la Liga Rosarina de Fútbol dejó su lugar, y la nueva institución rectora del fútbol rosarino pasó a ser la Asociación Rosarina de Fútbol. El torneo de primera pasó a llamarse Torneo Gobernador Luciano Molinas, en honor al por entonces Gobernador de la provincia de Santa Fe, Luciano Molinas, reemplazando así a la Copa Nicasio Vila. Simultáneamente, la Copa Santiago Pinasco continuaría siendo el campeonato de segunda división.
El comienzo del profesionalismo fue difícil para Central y el rendimiento del equipo fue irregular: la indisciplina de algunos jugadores, malas adquisiciones, divisiones políticas en la dirigencia y problemas económicos hicieron que los resultados deportivos no fueran muy buenos. Se decidió rescindir el contrato a muchos jugadores por «falta de entusiasmo, cariño y disciplina», lo que trajo los primeros juicios para el club.
Luego de algunas temporadas «en blanco», el primer título oficial de Rosario Central en la era profesional rosarina llegó en 1936, luego de obtener el Torneo Preparación de aquel año. Ese campeonato oficial organizado por la Asociación Rosarina de Fútbol se comenzó a jugar en 1934, y marcaba el inicio de la temporada futbolística rosarina. Se jugaba desde abril hasta fines de junio con el sistema de todos contra todos en solo una rueda. Rosario Central ganó su primera edición en 1936.
El conjunto auriazul y Newells Old Boys terminaron igualados en la tabla de posiciones y debieron jugar un partido desempate para definir al campeón. En el mismo, Rosario Central derrotó a su clásico rival por 3 a 2. Gómez y Rúa marcaron para Newell´s, mientras que Roberto D'Alessandro y Aníbal Maffei —en dos oportunidades— le dieron la victoria definitiva a Central. Vale destacar que esta sería la cuarta y última final de un campeonato oficial disputada por ambos equipos rivales hasta el día de hoy, y sería el primer título oficial profesional en la historia del club de Arroyito.
El conjunto canalla titular que ganó ese torneo generalmente formaba con: Pedro Aráiz; Justo Lescano e Ignacio Díaz; Rafael Luongo, Félix Ferreyra y A. Martínez; Juan Cerro, Cayetano Potro, Harry Hayes (h), Roberto D'Alessandro y Aníbal Maffei.
El año 1937 fue muy bueno para Central ya que pudo ganar los dos torneos oficiales que se jugaron. Ese año llegó al club el entrenador Natalio Molinari, que impuso orden táctico y solidez defensiva. Con un andar regular en los 2 torneos oficiales de la ARF los canallas obtuvieron el Torneo Gobernador Luciano Molinas —campeonato rosarino de Primera División—, y luego ganaron su tercer título profesional en la Asociación Rosarina al obtener el Torneo Ivancich, que reemplazaba al ya clásico Torneo Preparación. La formación base del conjunto auriazul que obtuviera el doblete fue la siguiente: Pedro Aráiz; Justo Lescano e Ignacio Díaz; Rafael Luongo, Félix Ferreyra y Alberto Espeche; Héctor Gómez, Ricardo Cisterna, Benjamín Laterza, Roberto D'Alessandro y Aníbal Maffei. También tuvieron significativa participación Luis Amaya, Germán Gaitán, Alfredo Fógel, Salvador Laporta y Juan Cerro.
En 1938 Rosario Central fue nuevamente campeón del Torneo Gobernador Luciano Molinas, en lo que fue la última participación de los equipos profesionales en torneos de la Asociación Rosarina, ya que en 1939 tanto Central como Newell´s ingresarían a los torneos de AFA para nunca más abandonarlos, y así, competirían en los campeonatos de la Asociación Rosarina con futbolistas amateur. El equipo canalla cambió a su entrenador en aquel año, ya que el exitoso ciclo de Natalio Molinari fue reemplazado por el técnico húngaro Juan Faunhoffer, quien impuso algunos cambios en la formación titular y logró también el título de campeón de Primera. El conjunto auriazul de 1938 solía formar con: Juan F. Martínez; Pedro Perucca e Ignacio Díaz; Carlos Echeverría, Claro Constancio Rivero y Alfredo Fógel; Salvador Laporta, Oscar Díaz, Pedro De Blasi, Ricardo Cisterna y Francisco Rodríguez.
El balance que dejó la era profesional de la Asociación Rosarina de Fútbol para Rosario Central fueron cuatro títulos oficiales: dos Ligas de Primera y dos copas oficiales.
En 1939 Rosario Central y su rival de la ciudad, Newell's Old Boys, solicitan a la Asociación del Fútbol Argentino su incorporación al torneo de Primera División nacional. La AFA decide otorgarles el permiso, mediante el cual Central lograría formar parte del campeonato de ese año.
Paralelamente a los torneos nacionales de AFA, el club continúa disputando los torneos locales pertenecientes a la Asociación Rosarina de Fútbol con equipos alternativos. Esto se debe a que, en reconocimiento a sus méritos deportivos y a su importancia a nivel nacional su primer equipo disputa los campeonatos de AFA y a raíz de esto, en la Asociación Rosarina —su liga de origen— presenta un equipo alternativo conformado por futbolistas amateur.
En lo futbolístico, los primeros pasos centralistas en los torneos profesionales de AFA fueron opacos. Pese a terminar en la mitad de la tabla y empatar ambos partidos con Newells 1 a 1, algunos resultados fueron malos. En su debut perdió 5 a 1 con Huracán, por 6 a 0 con River y por 5 a 0 ante Ferro. En la segunda mitad del año se contrató un técnico húngaro: Emérico Hirschl y el rendimiento del equipo mejoró un poco, destacando Alfredo Fógel, el defensor que no faltó nunca a ningún partido. En 1939 el campeón fue Independiente y Central terminó undécimo con 33 puntos (14 victorias, 5 empates y 15 derrotas).
A final de año se festejó el cincuentenario del club con partidos amistosos ante Boca, River y la selección argentina en Arroyito. Además el 8 de diciembre se pasó una antorcha de mano en mano por atletas desde la sede en el centro de la ciudad hasta el estadio, donde Thomas Hooper, uno de los fundadores, dio un discurso.
En 1941 Rosario Central descendió por primera vez al Campeonato de Primera B. En la fecha 28 se jugó el clásico con un resultado favorable al conjunto del Parque. En aquella tarde Newell´s se impuso por 5-0 y con este resultado el conjunto auriazul quedó en el último puesto de la tabla de posiciones —aún le restaban dos partidos por jugar para decidir si descendía o no— y el descenso se dio la última fecha cuando Rosario Central en condición de visitante enfrentó a Banfield y cayó por 4 a 2.
Como resultado final Rosario Central terminó el torneo ganando 6 partidos, empatando 4 y perdiendo 20.Primera al año siguiente, ganando 25 duelos, empatando 3 y perdiendo 4. Tuvo una gran participación en el torneo Waldino Aguirre, quien disputó 27 partidos y convirtió 33 goles.
El paso por la Segunda división fue breve: el club rosarino logró el ascenso aDurante toda la década del 40 Central se mantuvo en primera terminando en todos los torneos en mitad de tabla. Sin embargo en noviembre de 1948 se produjo una huelga de jugadores en todo el país que duró hasta abril de 1949. El torneo de AFA continuó con jugadores amateurs y muchos jugadores profesionales fueron tentados desde el exterior. Entre las bajas más notables de Central se puede nombrar a Benjamín Santos, goleador del torneo de 1948 , que emigró a Italia.
En 1950 el club de Arroyito perdió la máxima categoría por segunda vez, finalizando último, con 9 victorias, 7 empates y 18 derrotas. Al igual que en la anterior oportunidad en la que había descendido (1941), ganó el torneo de segunda y ascendió a la primera división al año siguiente. Los referentes del equipo del ascenso fueron Alfredo Fógel, el capitán del equipo, y Eduardo Di Loreto, que convirtió 29 goles.
La década del 50 tuvo resultados deportivos muy diversos para el canalla, destacándose los sextos puestos en los torneos de 1956 y de 1958.
Hasta el momento eran las dos mejores ubicaciones de Central desde que se había unido a los torneos nacionales profesionales en 1939.En la década de 1960, el club iba creciendo con los años: de los pocos socios que tenía en sus inicios, llegó a 4000 durante 1965 gracias al trabajo de su presidente Federico Flynn. En 1967, bajo la presidencia de Adolfo Boerio, la institución comenzó a proponerse metas superiores a la de solo participar sin muchas ambiciones en los torneos profesionales de AFA. Su proyecto, empezó por solidificar las divisiones inferiores del club con un trabajo a largo plazo. De esta manera, el plantel profesional comenzó a nutrirse de futbolistas surgidos de la cantera, aunque también se fueron incorporando algunos futbolistas y entrenadores de jerarquía procedentes de otras instituciones. Así, a partir de ese año, Rosario Central comenzó a disputar los torneos de igual a igual con los grandes del fútbol argentino. En aquella temporada, los auriazules finalizaron en la tercera colocación de la tabla general, hecho histórico para el club. En 1966 el proyecto ya estaba en marcha y Central jugó partidos amistosos con el Santos de Pelé, con quien perdió 1 a 0, y con el Real Madrid donde fue un empate 2 a 2.
El presidente Víctor Vesco —electo en 1970—, continuó con la obra de Boerio y bajo su mandato se consiguieron importantes logros deportivos e institucionales, siendo el presidente de Rosario Central durante todos los períodos en que el club consiguió títulos oficiales tanto de la Asociación del Fútbol Argentino como de Conmebol en la era profesional (1939 al presente).
Luego del subcampeonato en el Torneo Nacional de 1970, en donde cayó 2 a 1 ante Boca Juniors en la final, el club de Arroyito logró su primer título oficial en la era profesional de los campeonatos nacionales de la Asociación del Fútbol Argentino —y sexto nacional global— en el Torneo Nacional de 1971.
En junio de 1971, promediando el Metropolitano, llegó Ángel Labruna a Rosario para dirigir a Central. Si bien el equipo estaba medianamente armado y mantenía una estructura sólida, Angelito metió mano y retocó algunas cosas. El entrenador hizo debutar en Primera División a Carlos Aimar, un volante central batallador, fuerte y que mostraba muy buenas condiciones. A su vez, retrasó unos metros en el campo a Aldo Poy, colocándolo en una posición de armador, juntándolo con Colman, y dejando a Bóveda y a Gramajo más de punta.
En aquel Nacional de 1971, Rosario Central ganó su grupo y debió enfrentar en semifinales a Newell's Old Boys, quien había sido el segundo de la otra zona. El encuentro tenía que disputarse en terreno neutral, y el Estadio Monumental de Núñez fue testigo del duelo en el que Rosario Central venció por un gol a cero a su clásico rival con la recordada palomita de Poy en el segundo tiempo. Además, este tanto fue presentado al libro Guiness de los Récords por un grupo de hinchas de Central en 1995 para ser calificado como el gol más celebrado de la historia del fútbol ya que tradicionalmente, los hinchas del equipo y el propio Aldo Pedro Poy se reúnen todos los 19 de diciembre de cada año para rememorar la jugada y gritar de nuevo el gol.
La final del campeonato fue ante San Lorenzo y se debía disputar también en terreno neutral. Por el sorteo correspondiente, resultó que se disputaría en la cancha de Newell's Old Boys el 22 de diciembre. El conjunto canalla comenzó perdiendo gracias a un gol de Héctor Scotta a los pocos minutos de haberse iniciado el encuentro. Pero Central reaccionó, y con goles de Roberto Gramajo y Carlos Colman a los 17 y 24 minutos respectivamente ganó el juego y se convirtió en el primer campeón nacional de la Primera división de AFA del interior del país. El estado físico del equipo sumado a la experiencia de los caudillos —Pascuttini, Fanesi, Carrascosa, entre otros— hizo capaz que Rosario Central alcanzara el título. Las estadísticas marcan que en 16 partidos los canallas solo recibieron 14 goles.
Los festejos masivos de la gente se multiplicaron por toda la ciudad de Rosario, que luego de 32 años de competir en la Primera División del fútbol argentino, obtenía así su primer gran galardón en el fútbol grande de AFA en la era profesional.
Plantel campeón: Carlos Aimar, Ramón César Bóveda, Roberto Gramajo, Carlos Colman, Alberto Fanesi, Norberto Menutti, Aurelio José Pascuttini, Aldo Pedro Poy, Ángel Landucci, Mario Killer, José Jorge González, Miguel Bustos, Hugo Zavagno, Jorge Carrascosa, Alberto Gómez, José Agustín Mesiano, Aldo Villagra, Eduardo Miguel Solari, Daniel Pedro Killer, Eduardo Barrio, Roberto Astudillo, Gabriel Arias, Eduardo Toro, Daniel Astegiano, Rubén Rodríguez, Daniel Aricó, y Víctor Mancinelli.
Entrenador: Ángel Labruna
En el segundo semestre de 1973 Rosario Central volvería a ser protagonista del fútbol argentino. De la mano de Carlos Timoteo Griguol como técnico —quien hacía pocos años había dejado el fútbol y había dirigido a la Reserva del club entre 1971 y principios de 1973— los rosarinos volvieron a dar una vuelta olímpica en el fútbol argentino de primera división.
Griguol impuso su estilo propio de juego, basado en el orden defensivo y la efectividad a la hora de atacar.
El equipo se destacó por ser aguerrido, sólido, fuerte y tener mucha marca, y por todas estas características se lo apodó Los Picapiedras. Central clasificó junto a Atlanta, River y San Lorenzo para disputar el cuadrangular final. El sistema era jugar todos contra todos a una sola rueda, es decir, tres encuentros cada uno, y el de mayor puntaje final sería el nuevo Campeón Nacional. River Plate tenía casi 15 años sin conseguir un título oficial —el último había sido en 1957—, y con esa presión jugó el partido de visitante ante los de Arroyito. En el primer juego de la zona final Central ganó 3-1 sobre los millonarios con tantos de Cabral, Bóveda y otro de J.J. López en contra de su propia valla.
La siguiente fecha se jugó frente a Atlanta en Buenos Aires. El club porteño había sido la revelación de este torneo, pero no le alcanzó para superar al equipo de Griguol. Con tantos de Eduardo Solari de cabeza y de Carlos Aimar, la victoria fue canalla por 2 a 1. River, venció en aquella jornada por 3 a 2 a San Lorenzo y con un empate en la última fecha, el conjunto de Griguol se aseguraría el título.
El 29 de diciembre, el Estadio Monumental fue testigo nuevamente del festejo rosarino: Central empató 1 a 1 con San Lorenzo y se aseguró así su segundo título de la década, y el séptimo a nivel nacional de su historia. El gol de Central lo anotó Roberto Cabral.
Plantel campeón: Aurelio José Pascuttini, Juan Antonio Burgos, José Jorge González, Eduardo Solari, Carlos Biasutto, Carlos Aimar, Aldo Pedro Poy, Daniel Pedro Killer, Roberto Cabral, Daniel Aricó, Ramón Bóveda, Luis Giribet, Roberto Carril, Carlos Colman, Oscar Rubiola, Rubén Rodríguez, Miguel Ángel Cornero, Mario Killer, Gabriel Arias y Carlos Munutti.
Entrenador: Carlos Timoteo Griguol
En 1974, Rosario Central fue subcampeón del Metropolitano y del Torneo Nacional. Esto lo habilitó a jugar un triangular que definió a los dos equipos argentinos para la Copa Libertadores 1975. El mismo, se denominó oficialmente «Torneo reducido para clasificar dos equipos para el Campeonato Sudamericano de Fútbol Libertadores de América 1975». Este no fue considerado liguilla, sino torneo oficial reducido y el ganador obtendría el título de «Campeón Argentino». Rosario Central disputó ese certamen junto a los campeones del Nacional 1974 y Metropolitano 1974: San Lorenzo y Newell's Old Boys, respectivamente. El equipo de Arroyito venció a San Lorenzo 1 a 0 como visitante con gol de Hugo Zavagno, y luego a Newell´s 2 a 0 como local, con goles de Mario Kempes y de Roberto Cabral, lo que le dio la clasificación para representar a Argentina en la Copa Libertadores de 1975, en carácter de campeón argentino 1974 junto al segundo, Newell's Old Boys subcampeón. Durante la temporada se destacó Mario Kempes, la incorporación que había llegado desde Instituto de Córdoba, a principios de año. Fue goleador del Nacional de 1974 y vistió la camiseta canalla hasta 1976. Además de ser una vez más goleador del torneo Metropolitano de 1976, se convirtió en el mayor goleador de la historia de Central en la era profesional de AFA, haciendo más de 90 goles en 2 años y medio.
En esta década, Rosario Central logró participar de cuatro ediciones de la Copa Libertadores de América. Lo hizo en las copas de 1971, 1972, 1974 y 1975. En esta última se enfrentó —por primera vez en la historia en duelos internacionales— al Club Atlético Newell's Old Boys en la primera ronda. En el grupo también estaban Olimpia y Cerro Porteño de Paraguay. Los clubes argentinos finalizaron en la primera posición, habiendo empatado en los enfrentamientos entre sí. En esa copa solo clasificaba el primero de cada grupo, por lo que tuvieron que jugar un encuentro desempate para definir quién pasaba a la ronda semifinal. El duelo lo ganó Central por 1 a 0, con gol de Mario Kempes el 11 de abril de 1975. Finalmente, el club auriazul llegó a la ronda semifinal de aquella copa, quedando a solo un gol de diferencia del paso a la final.
El comienzo del Nacional de 1980 no fue bueno para Central. Al entrenador Ángel Tulio Zof le costó ensamblar las piezas y el equipo clasificó con lo justo para los cuartos de final, ganándole el último partido de la fase regular 2 a 0 a Vélez en el Estadio José Amalfitani. Central debía ganar sí o sí para pasar de fase, y así lo hizo. La multitud centralista que copó el estadio de Vélez gozó aquella tarde gracias a los tantos de Edgardo Bauza y de Félix Orte, ambos en el segundo tiempo.
A partir de esa instancia, Central hizo valer la condición de local ya que las diferencias de gol marcadas en el Estadio Gigante de Arroyito fueron claves para que Central avanzara a las rondas siguientes y conquistara un nuevo título. En cuartos de final se enfrentó a Unión de Santa Fe, obteniendo una victoria 2 a 0 de local y una derrota 2 a 1 de visitante. En el duelo de ida disputado en el Estadio Gigante de Arroyito promediando el segundo tiempo fue expulsado Ricardo José Ferrero —el arquero de Central—, y el conjunto auriazul ya había hecho los dos cambios reglamentarios que se permitían en aquel entonces. Héctor Chazarreta pidió ir a atajar y tuvo una destacada labor, tapando algunos disparos peligrosos del equipo tatengue. El partido finalizó 2 a 0 a favor de Central. El resultado global de 3 a 2 a su favor alcanzó para avanzar.
En las semifinales se volvió a cruzar con su clásico rival: Newell's Old Boys. El triunfo por 3 a 0 en el encuentro de ida con tantos de Ghielmetti, José Luis Gaitán y Marchetti, facilitó la victoria global del club de Arroyito. La derrota 1 a 0 en la vuelta no hizo mella en el conjunto auriazul, ya que el global de 3 a 1 a favor lo clasificó para disputar la final del campeonato.
La final enfrentó al equipo de Zof con el Racing de Córdoba, dirigido por Alfio Basile. La producción de La Sinfónica —así le decían a aquel equipo auriazul— anticipó el tercer campeonato en la era profesional, y octavo a nivel nacional contando toda la historia. Fue victoria canalla 5 a 1 en la ida, y derrota por 2 a 0 en la vuelta, siendo el marcador global de 5 a 3 para Central. Los cuatro goles de diferencia permitieron que el 21 de diciembre la institución rosarina diera su tercera vuelta olímpica oficial en la era profesional de AFA en el Chateau Carreras.
Este campeonato le dio derecho a participar de la Copa Libertadores 1981, en donde quedó segundo en su grupo detrás del Deportivo Cali de Colombia, no logrando así el pase a la ronda semifinal.
Plantel campeón: Juan Carlos Ghielmetti, Edgardo Bauza, Daniel Teglia, Félix Orte, José Luis Gaitán, Eduardo Bacas, Víctor Marchetti, Jorge Alberto García, Oscar Craiyacich, Ricardo José Ferrero, Héctor Chazarreta, Oscar Agonil, Guillermo Trama, Aldo Espinoza, Omar Arnaldo Palma, Daniel Sperandío, Daniel Alberto Carnevalli, Carlos Magistral y Mario Finarolli.
Entrenador: Ángel Tulio Zof
En 1984, a tan solo cuatro años de haber conseguido su tercer título de Primera División, Rosario Central descendió a la Primera B por tercera vez en su historia. En 1983 la AFA había reinstaurado el promedio del descenso en la Argentina, lo cual significaba que los descensos a segunda se definirían por la acumulación de puntos de las últimas dos temporadas, dividiéndolos a la cantidad de partidos disputados en las mismas. Las pobres campañas realizadas por Central tanto en 1983 como en 1984 hicieron que el club no pudiera escapar al descenso de categoría.
En 1985 la institución reforzó su plantel profesional con jugadores de renombre y contrató a Pedro Marchetta como entrenador. Así, pudo lograr el retorno a la máxima categoría con facilidad: ganó 25 enfrentamientos, empató 10 y cayó en 7.
Luego de ascender a Primera en 1985, a Central se le presentaba un nuevo desafío: poder hacer un buen papel nuevamente en el Campeonato mayor del fútbol argentino. El torneo 1986-87 duró 38 fechas y se jugaron dos ruedas de 19 partidos cada una. Luego de una caída en la fecha 29 por 4 a 1 frente a Boca Juniors en la Bombonera, Rosario Central se recuperó, y las próximas ocho fechas dejaron un saldo de seis victorias y dos empates. De esta manera, el equipo canalla —dirigido una vez más por Ángel Tulio Zof— llegó como puntero al último encuentro con una diferencia de dos puntos sobre los segundos: Newell's e Independiente.
En la última fecha Rosario Central visitó a Temperley el 2 de mayo de 1987. El encuentro empezó trabado, y al minuto 44 del primer tiempo, Ricardo Dabrowski de cabeza anotó el 1 a 0 parcial para los celestes. En el segundo tiempo, promediando la etapa complementaria, Omar Arnaldo Palma empató con un gol de penal. Fue 1 a 1 y una diferencia inalcanzable para Newell's, que obtuvo el subcampeonato. Los centralistas en las tribunas del estadio de Temperley, festejaron una nueva estrella auriazul en el profesionalismo, y su noveno título oficial de AFA contabilizando toda la historia.
Este nuevo galardón le dio derecho a participar de la Copa Libertadores 1987, en donde quedó segundo en su grupo detrás de Independiente, quien finalmente logró el pase a la ronda semifinal.
Plantel campeón: Osvaldo Escudero, Omar Arnaldo Palma, Edgardo Bauza, Julio Pedernera, Hernán Díaz, Hugo Galloni, Adelqui Cornaglia, Juan José Urruti, Roberto Gasparini, Fernando Lanzidei, Jorge Balbis, Alejandro Lanari, José Di Leo, Ariel Cuffaro Russo, Jorge Fossati, Marcelo Toscanelli, Pedro Argota, Claudio Scalise, Rubén Alejandro Rojas, Roque Caballero, Erasmo Doroni y Esteban Game.
Entrenador: Ángel Tulio Zof
Por ser campeón de Argentina fue invitado a participar de la Copa de Oro de 1987: un torneo amistoso llevado a cabo en Estados Unidos del que formaban parte varios equipos campeones de distintas ligas del mundo. El torneo estaba compuesto por una fase de grupos donde Central venció 1 a 0 al Guadalajara de México con gol de Palma, y luego derrotó 3 a 1 al Dundee United de Escocia, con goles de Argota, Palma y Candella. En las semifinales debió enfrentarse a la Roma de Italia con quien empató 1 a 1, con gol de Bauza y ganando luego el conjunto rosarino en los penales con un marcador final de 5-4. Finalmente, Central perdió en el partido decisivo con el Vasco de Gama por 2 a 1.
En julio de ese mismo año, se decidió organizar un partido amistoso llamado Duelo de Campeones entre el campeón de Argentina y el de Italia. Central viajó Nápoles para jugar un partido contra el Nápoli de Diego Armando Maradona que era el campeón del calcio. El cotejo terminó 1 a 0 a favor de los rosarinos con gol de Jorge Balbis de cabeza. Además, Alejandro Lanari le contuvo un penal al propio Maradona cuando ya finalizaba el partido.
El 24 de diciembre de 1989 Rosario Central cumplió 100 años de vida, por lo que se festejó el centenario con una cena para 10 000 personas.
Los primeros torneos de esta década fueron malos. La mayoría de los campeonatos terminaron con Central de mitad de tabla hacia abajo, y esto comprometió al equipo con el descenso. En enero de 1994, el club volvió a contratar a Pedro Marchetta como entrenador. El técnico que había devuelto a la Primera División a Central en 1985 volvía al club de Arroyito con muchas expectativas, ya que además de aquel logro obtenido 9 años atrás, el D.T. venía de realizar muy buenas campañas con Independiente de Avellaneda. Marchetta armó un equipo mixto, donde mezcló juventud con experiencia: incorporó a Roberto Molina proveniente de Ferrocarril Oeste, y le dio rodaje a los por entonces jóvenes Pablo Sánchez, Kily González, Marcelo Delgado, Claudio Úbeda, Horacio Carbonari, y Raúl Gordillo entre otros, rodeándolos de jugadores de experiencia, como Omar Palma, José Luis Rodríguez, Jorge Balbis, y Juan Ramón Jara. En el Clausura 1994 Central mostró un juego ofensivo y vistoso, y terminó el campeonato tercero con 23 puntos, peleando el título hasta el final palmo a palmo con Independiente y Huracán. Para el Apertura de 1994, llegó el paraguayo Celso Ayala y la campaña fue regular, finalizando octavos.
En el Clausura de 1995, Marchetta le dio rodaje al joven Cristian Colusso, que era una de las «joyas» de la cantera canalla. El equipo hizo otra buena campaña, evitando así problemas con el promedio. Así, el puntaje de la tabla acumulada clasificó a Central para la Copa Conmebol de ese año. Finalizado el Torneo Clausura, Marchetta no renovó su contrato y decidió marcharse a Racing, por lo que Central salió en busca de un nuevo entrenador. El presidente Víctor Vesco volvió a contratar a Don Ángel Tulio Zof, quien —una vez más— se hizo cargo del primer equipo auriazul en el mes de julio de ese año para afrontar la temporada 1995-96.
Con la renuncia de Marchetta, la dirigencia de Central pensó una vez más en un viejo conocido del club: Angel Tulio Zof, D.T. campeón con Central en 1980 y en 1987 y subcampeón en 1970. Don Ángel armó un equipo en donde —una vez más en la historia canalla— tuvo que mezclar juventud con algunos jugadores de experiencia. Ante las ventas de Darío Scotto y el Kily González a Boca, y la de Roberto Molina y Juan Ramón Jara a Independiente, el entrenador pidió con insistencia la llegada del uruguayo Rubén Da Silva —proveniente de Boca— y la del mediocampista derecho Eduardo Coudet, de Platense. También llegó para ocupar un lugar en el laterial izquierdo el peruano Percy Olivares. A su vez, la continuidad de Omar Palma fue fundamental para el proyecto de Don Ángel. Todos ellos, se insertaron en un plantel plagado de jóvenes que ya venían jugando con Marchetta, como por ejemplo Pablo Sánchez, Raúl Gordillo, Horacio Carbonari, y Roberto Bonano, entre otros. Dos grandes apariciones en 1995 de la mano de Zof fueron el atacante Martín Cardetti y el defensor izquierdo Patricio Graff, quienes debutaron en aquel año.
Así, con una marcha irregular en el campeonato Apertura de 1995, el equipo canalla centró sus prioridades en el plano internacional: la Copa Conmebol 1995. En ese torneo —símil de la Copa UEFA europea y uno de los precursores de la actual Copa Sudamericana—, comenzó eliminando en octavos de final al Defensor Sporting de Uruguay. El cotejo de ida disputado en el Campus de Maldonado favoreció a Central, que ganó 3 a 1 con goles de Martín Cardetti, Eduardo Coudet y Rubén Da Silva. Para rematar la clasificación —y como iba a ser durante toda la copa—, Central ganó en el Gigante el partido revancha: fue 2 a 1 gracias a los tantos de Pablo Sánchez y el Polilla Da Silva.
En cuartos de final Rosario Central eliminó al Cobreloa de Chile. En el duelo de ida los auriazules vencieron como locales 2-0 con goles anotados en el segundo tiempo por Pablo Sánchez y Horacio Carbonari. La vuelta, disputada en el desierto de Calama, aparecía en lo previo como difícil ya que el club chileno poseía un muy buen récord actuando en su estadio en competiciones internacionales. Finalmente, fue un mero trámite para los rosarinos, que derrotaron al local 3 a 1 con tantos de Omar Palma, Cristian Daniele y Rubén Da Silva.
Sobre fines de noviembre, por la ida de las semifinales, Rosario Central visitó Asunción para enfrentar al Atlético Colegiales de Paraguay. Los «canallas» ganaron 2 a 0 con tantos señalados en el segundo tiempo por Raúl Gordillo y Eduardo Coudet, y se colocaron a un paso de la final. El 7 de diciembre de 1995 Central logró clasificarse por primera vez en su historia a una final de una copa internacional oficial. El pase fue certificado por los goles de Carbonari, Cardetti y Coudet para la victoria auriazul por 3 a 1 en el Gigante de Arroyito. El rival para la instancia final iba a ser Atlético Mineiro de Brasil, quien venía de eliminar al América de Cali en la otra llave semifinal.
La final de la Copa Conmebol de 1995 es recordada por el particular hecho de que Rosario Central logró revertir un marcador adverso de 0 a 4 que se trajo del Mineirão de Belo Horizonte, para finalmente vencer el 19 de diciembre al Atlético Mineiro de Brasil en el Gigante de Arroyito por el mismo resultado, y ganar la copa en la definición por penales. Los goles del conjunto rosarino —dirigido una vez más por Ángel Tulio Zof— fueron marcados por Horacio Carbonari, en dos ocasiones —el segundo suyo, el cuarto del equipo, en el último minuto del encuentro—, Rubén Da Silva y Martín Cardetti. Los tiros desde el punto del penal terminaron 4 a 3 a favor de Central, y así, se adjudicó la Copa Conmebol.
Central fue el campeón —también por primera vez para un equipo del interior del país— en un certamen internacional oficial de la era profesional. Aquel título lo habilitó a disputar la Copa Master de Conmebol de 1996, y la Copa de Oro Nicolás Leoz en ese mismo año.
Plantel campeón: Roberto Bonano, Roberto Abbondanzieri, Federico Lussenhoff, Horacio Carbonari, Patricio Graff, Diego Ordóñez, Gustavo Falaschi, Percy Olivares, Eduardo Coudet, Raúl Gordillo, Omar Palma, Cristian Daniele, Pablo Sánchez, Cristian Colusso, Sergio Alberto Fernández, Humberto Biazotti, Rubén Da Silva, Martín Cardetti y Mario Pobersnik.
Entrenador: Ángel Tulio Zof
En 1996 Rosario Central logró clasificarse nuevamente para la Copa Conmebol. A nivel local, finalizó sexto. en el Torneo Clausura y quinto. en el Apertura. En la Copa Conmebol, eliminó Cobreloa de Chile en primera ronda y a River de Montevideo en cuartos de final. Así, el conjunto auriazul se topó con el Club Atlético Lanús en semifinales, el cual derrotó a los rosarinos en ambos enfrentamientos. Finalmente, los granates fueron campeones de aquella copa.
En 1998 el equipo rosarino volvió a clasificarse para la Copa Conmebol. En primera fase eliminó al Audax Italiano de Chile. En cuartos de final los de Arroyito vencieron a Huracán Buceo de Uruguay, mientras que en semifinales derrotaron al Atlético Mineiro de Brasil.
La final de la Copa Conmebol 1998 debió disputarla frente al Santos de Brasil, el cual no ganaba un título internacional desde los tiempos de Pelé. Finalmente, los brasileños se impusieron 1 a 0 en el duelo de ida —disputado en su estadio de Vila Belmiro— y consiguieron la igualdad en cero en el Estadio Gigante de Arroyito, lo cual les permitió obtener el título.
En 1999 Rosario Central fue subcampeón del Torneo Apertura de aquel año. El equipo dirigido por Edgardo Bauza, y con jugadores como Ezequiel González, Juan Antonio Pizzi, Ivan Moreno y Fabianesi, Ricardo Canals, José María Buljubasich, y Rafael Maceratesi entre otros, logró una serie de 9 victorias consecutivas —récord en la historia del club— lo cual llevó a la institución a tener, hasta la última fecha del certamen, expectativas de campeonar. Los 43 puntos finales no alcanzaron a los 44 de River Plate, quien finalmente fue el campeón.
Por su desempeño en el campeonato, Central se clasificó a la Copa Libertadores 2000. En esta edición, el club fue segundo en su grupo, y quedó eliminado en octavos de final ante el Corinthians de Brasil, cayendo por penales.
En la Copa Libertadores 2001 hizo una destacada labor: clasificó primero en su grupo, posteriormente eliminó al Cobreloa de Chile en octavos de final, luego al América de Cali en cuartos, y cayó en semifinales ante el Cruz Azul de México.
En la edición de 2004, fue derrotado por el San Pablo en octavos de final, mientras que en la de 2006, no logró la clasificación a la segunda fase.
Además, el club participó también de la Copa Mercosur en el año 2000, donde cayó en la definición por penales contra el Vasco da Gama en cuartos de final, quién finalmente se consagró campeón.
Si bien durante esos años muchas de sus participaciones internacionales fueron buenas, descuidó mucho los torneos nacionales, terminando de mitad de tabla hacia abajo en la mayoría de los campeonatos entre 2000 y 2002. En 2003, con Miguel Ángel Russo como DT, su imagen cambió ya que terminó 4.º en el Clausura, con 37 puntos. Además Luciano Figueroa fue goleador del campeonato con 17 tantos. La campaña hecha en la temporada 2002-03 lo clasificaron para la Copa Sudamericana 2003 y para la Copa Libertadores 2004. En el torneo Apertura 2003 finalizó en quinta posición con 31 puntos.
En 2005, clasificó a la Copa Sudamericana de ese año. Lo significativo de esta edición de la copa fue que volvió a encontrarse con su clásico rival en un torneo internacional oficial luego de 30 años de la última oportunidad en que lo hicieran, pero con la diferencia de que esta vez, el máximo duelo rosarino se dio en una clasificación en partidos de ida y vuelta. Tras empatar como visitante por 0 a 0, el elenco auriazul se quedó con la clasificación el 29 de agosto de 2005, tras vencer por 1 a 0 a Newell's en el Gigante de Arroyito, con gol de Germán Rivarola a los 45 minutos del primer tiempo.
Los años siguientes acumularon campañas muy irregulares para Central. Los 61 puntos acumulados en la temporada 2004-2005 hizo que su promedio no sea muy bajo durante la temporada 2005-2006. En la temporada siguiente (2006-07) Central obtuvo un total de 52 puntos, lo que lo mantuvo en la mitad de la tabla de los promedios.
Luego de algunas malas campañas en los años 2006 y 2007, durante la temporada 2007-2008 jugar la promoción era una posibilidad hasta las últimas fechas, pero el equipo logró sacar la cantidad necesaria de puntos para permanecer en Primera.
En la temporada temporada 2008-2009, y luego de dos torneos bastante pobres, Rosario Central tuvo que revalidar su lugar en la máxima categoría del fútbol argentino, debiendo disputar la promoción ante el Club Atlético Belgrano de Córdoba —equipo clasificado 4.º de la B Nacional de esa temporada—. En el duelo de ida, disputado en la ciudad de Córdoba, los canallas derrotaron a los celestes por 1 a 0, con gol de Jesús Méndez, mientras que en la revancha, el duelo finalizó 1 a 1 en el Estadio Gigante de Arroyito, con gol de Emilio Zelaya para los rosarinos. Así, con el resultado global por 2 a 1, Rosario Central mantuvo la categoría.
Durante el Apertura 2009 Central cosechó 31 puntos, sin embargo vendió a muchos de sus referentes del equipo y los jugadores de las inferiores del club debieron hacer frente al Clausura 2010.
En mayo de 2010 Rosario Central —dirigido por Leonardo Madelón— tuvo que volver a revalidar su lugar en Primera, esta vez jugando la promoción contra All Boys. El primer partido se llevó a cabo el 19 de mayo en el Estadio Islas Malvinas y All Boys abrió el marcador en el primer tiempo. Central logró empatar el encuentro en una de las últimas jugadas mediante un cabezazo de Guillermo Burdisso. El partido de revancha se disputó el domingo 23 de mayo en el Gigante de Arroyito y el equipo visitante se impuso por 3 a 0 por lo que Rosario Central descendió a segunda división luego de 25 años. Horacio Usandizaga renunció al cargo de presidente y se llamó a elecciones a mitad de año. Las mismas fueron ganadas por la agrupación Raza Canalla, la cual contaba con Norberto Speciale como presidente y Gonzalo Belloso como mánager deportivo.
El primer año de Central en la B no fue bueno ya que nunca logró estar en puestos de ascenso. El primer entrenador en la temporada fue Reinaldo Merlo quien se retiró del cargo en la fecha 12 por malos resultados. Su reemplazante fue Héctor Rivoira, que ya tenía antecedentes de ascensos a primera división, sin embargo corrió la misma suerte que su predecesor y dejó de ser el entrenador en la fecha 26. El elegido para ocupar el puesto de DT fue Omar Palma —quien debutó en ese cargo—. Una de sus primeras medidas fue separar del grupo a Cristian González, uno de los referentes del plantel. El equipo logró remontar en la tabla de posiciones principalmente con la inclusión de varios juveniles en la formación titular. Una fecha antes de terminar el torneo Palma renunció y asumió el cargo interinamente Fernando Lanzidei.
Al finalizar la temporada 2010-2011 de la Primera B Nacional, el club no logró el objetivo del ascenso y permaneció por segundo año consecutivo —por primera vez en su historia— en segunda división. La dirigencia continuó siendo la misma y en julio de 2011 contrataron a Juan Antonio Pizzi como entrenador. Un equipo muy renovado logró cambiar la imagen dada en la temporada anterior. Durante la primera mitad del 2012 el equipo fue escalando posiciones y logró ganar 7 partidos consecutivos recibiendo solo un gol en contra entre las fechas 28 y 34, por lo que pasó a ocupar el primer lugar a falta de 4 partidos. Sin embargo de los últimos 12 puntos en juego solo obtuvo uno (perdió los últimos tres partidos) por lo que terminó el torneo en cuarto lugar y quedó en puestos de promoción, teniendo que enfrentar a San Martín de San Juan. El primer partido se llevó a cabo el jueves 28 de junio de 2012 con Central como local y terminó en un empate 0 a 0. El de vuelta se disputó el 1 de julio de 2012 en San Juan y el resultado fue el mismo que en la ida, por lo cual Central no pudo ascender y continuó por tercer año consecutivo en la Primera B Nacional.
A pesar de que Pizzi estuvo cerca de conseguir el objetivo, la dirigencia decidió cambiar de entrenador para la Primera B Nacional 2012-13 y contrató a Miguel Ángel Russo. El comienzo de Central en el campeonato fue similar al del primer año en la B, y llegó a estar en decimocuarta posición en la fecha 11 por lo que se puso en duda la continuidad de Russo. Sin embargo a partir de la fecha 13 el equipo ganó 12 partidos consecutivos lo que hizo que alcance el primer lugar en la tabla de posiciones. Además en esa racha de partidos batió su récord de valla invicta que mantenía desde el año 2004, esta vez Mauricio Caranta estuvo 606 minutos sin recibir goles.
El 19 de mayo de 2013, luego de vencer por 3 a 0 a Gimnasia de Jujuy como visitante, Rosario Central aseguró su regreso a la Primera División, restando 4 fechas para que termine el campeonato. En los festejos en Rosario, hubo cerca de 100 000 personas reunidas en el Monumento a la Bandera. Logró ganar el campeonato en la última fecha al derrotar por 1 a 0 a Deportivo Merlo.
El Torneo de Transición 2014 del fútbol argentino marcó la irregularidad que Rosario Central venía teniendo desde los últimos tiempos. Es por eso que Miguel Ángel Russo optó por dos objetivos para dicha temporada: obtener la tercera victoria consecutiva ante el eterno rival Newell's Old Boys —hecho que finalmente ocurrió el 19 de octubre de 2014 por 2 a 0— y como objetivo principal la Copa Argentina 2013-14. Así, los dirigidos por Miguel Russo derrotaron en instancia de 16vos. de final, el 26 de julio de 2014 a Juventud Unida de San Luis por 3 a 1, en el estadio de Instituto Córdoba, con goles de Franco Niell, Jonás Aguirre y Sebastián Abreu, señalando el descuento para Juventud Emanuel Reynoso.
En octavos de final, Central enfrentó al Club Atlético Tigre el 24 de septiembre de 2014, nuevamente en la ciudad de Córdoba. En esta ocasión, el uruguayo Sebastián Abreu volvió a convertir, siendo este el único gol del partido que le posibilitó a los canallas participar de los cuartos de final de la copa.
En dicha instancia, los conducidos por Miguel Ángel Russo debieron sortear a River Plate para hacerse un lugar en las semifinales del certamen federal. El duelo se disputó en el Estadio San Juan del Bicentenario, el 9 de octubre de 2014, y se definió por tiros desde el punto del penal, ya que en los 90 minutos ninguno pudo convertir goles. En la tanda de penales, el conjunto auriazul se impuso por 5 a 4. Todos los pateadores convirtieron, a excepción del riverplatense Bruno Urribarri, cuya ejecución fue retenida por Mauricio Caranta. Al ser este el último tiro perteneciente a River Plate de la serie de 5, permitió el pase de Central a la Semifinal con el acierto del último penal, ejecutado por Sebastián Abreu.
La semifinal de la copa volvió a encontrar a Rosario Central en el estadio del Bicentenario, en San Juan, el 19 de noviembre de 2014, esta vez para enfrentar al Argentinos Juniors de Juan Román Riquelme. En esta ocasión, los rosarinos «despacharon» a su rival con un contundente 5 a 0. Las anotaciones fueron de Sebastián Abreu, Franco Niell, Alejandro Donatti, Javier Correa y Hernán Fabián Encina. La victoria sin atenuantes posibilitó a Rosario Central jugar una final por un campeonato oficial luego de 16 años. En aquella ocasión, los rosarinos habían caído derrotados ante Santos de Brasil, en el partido decisivo de la Copa Conmebol 1998. Para esta final, más de 20 000 hinchas canallas acompañaron al equipo a la ciudad de San Juan, distante a unos 1000 km de la ciudad de Rosario.
La final se disputó el 26 de noviembre de 2014 en el Estadio San Juan del Bicentenario y esta vez es rival fue el Club Atlético Huracán. Finalmente, «El Globo» de Parque Patricios se quedó con la copa tras ganar 5 a 4 en la tanda de penales luego de un 0 a 0 sin grandes ocasiones de gol para ninguno de los dos bandos durante los 90 minutos. Los tiros marrados fueron por parte de Paulo Ferrari —desviado—, Mauricio Caranta —contenido por Marcos Díaz— y Hernán Fabián Encina, también atajado por el arquero.
El 15 de diciembre de 2014 el Chacho Eduardo Coudet fue oficializado por la dirigencia de Rosario Central como el director técnico de la entidad rosarina por los próximos dos años. En su primer año como entrenador, Coudet llevó a Central a realizar una muy buena campaña tanto en el torneo local como en la Copa Argentina, finalizando en la tercera ubicación del Campeonato 2015, donde el equipo auriazul cosechó 16 victorias, 11 empates y solo 3 derrotas. Además, clasificó al equipo para la Copa Libertadores 2016.
En la Copa Argentina 2014-15, Central llegó a la final y fue subcampeón por segundo año consecutivo. En primera fase elimió a Deportivo Riestra, al que venció 3 a 1. En 16vos. de final dejó en el camino a River Plate, a quien derrotó por 2 a 0 en el Estadio San Juan del Bicentenario. En octavos de final, superó a Ferro Carril Oeste en definición por penales, luego de igualar 0 a 0 en los 90 minutos de juego. Posteriormente, en cuartos de final el conjunto canalla le ganó a Estudiantes de La Plata por 2 a 1, mientras que en semifinales venció a Racing Club de Avellaneda por 1 a 0. En la final de la Copa, cayó 2 a 0 ante Boca Juniors en un polémico partido signado por los gruesos errores arbitrales del juez Diego Ceballos y de su asistente Marcelo Aumente que beneficiaron al ganador. En el primer tiempo el árbitro —a instancias del juez de línea— anuló un gol al conjunto rosarino por una polémica posición adelantada, mientras que durante el segundo tiempo del partido, se produjeron dos situaciones determinantes que le darían la copa al club xeneize: al comienzo de la segunda mitad, Ceballos cobró un penal por una falta cometida fuera del área, y sobre el final del partido el juez —a instancias de su asistente Aumente— convalidó un gol en posición adelantada de Andrés Chávez, con un resultado final de 2 a 0 en favor de Boca Juniors. El duelo se dio el 4 de noviembre de 2015, en el estadio Mario Alberto Kempes de la ciudad de Córdoba.
En abril de 2016 la Federación Santafesina de Fútbol, entidad que nuclea a todas las Ligas y Asociaciones de fútbol de la Provincia de Santa Fe, decidió crear —en conjunto con el Gobierno de Santa Fe— una copa en donde estén representados todos los equipos provinciales de todas las Ligas, incluso los que participan de la Primera División de la Asociación del Fútbol Argentino. Así, surgió el torneo oficial de Primera división a nivel regional denominado Copa Santa Fe en el cual el club ganador del torneo se corona con el título de «Campeón Provincial».
En la edición de 2016, el conjunto auriazul avanzó hasta cuartos de final. Para la edición de 2017, Rosario Central decidió afrontar el torneo con un equipo alternativo, compuesto por jugadores de la divisional reserva, y dirigidos por Leonardo Fernández, DT de la reserva también. En octavos de final, Central derrotó claramente a Alianza Sport —equipo de la Asociación Rosarina de Fútbol— por 4 a 0, con dos goles de Ijiel Protti, uno de Diego Becker y otro de Joaquín Pereyra.
En la serie de cuartos de final se venía Unión de Santa Fe, conjunto de Primera División, que ponía a todos sus titulares para dicha llave. En la ida, disputada en el Estadio Gigante de Arroyito, Central ganó 2 a 0, con tantos de Rodrigo Migone y de Fernando Alarcón. En el duelo de vuelta, disputado en el Estadio 15 de Abril, los juveniles canallas sorprendieron y volvieron a derrotar a los tatengues, esta vez por 1 a 0 con gol de Ijiel Protti en el primer tiempo.
En semifinales venía al Gigante de Arroyito el Atlético San Jorge, club que militaba en el Torneo Federal B. La llave fue resuelta con facilidad por Rosario Central, quien venció 5 a 2 con dos tantos de Ijiel Protti, uno de Agustín Coscia, otro de Palavecino y el último de Becker.
En la final, el conjunto de Arroyito debió enfrentar a Atlético Rafaela, club que en esos momentos militaba en la Primera B Nacional lugeo de su descenso desde la Primera en mayo de ese año. En el duelo de ida, disputado en el Estadio Nuevo Monumental de Rafaela, los dirigidos por Leo Fernández se impusieron 1 a 0 por sobre la Crema, con un gol agónico de Agustín Coscia. En la revancha, disputada el 20 de octubre ante gran cantidad de público que apoyó al equipo de juveniles, Rosario Central igualó 2 a 2 contra Atlético en el Gigante de Arroyito. Coscia y Diego Becker fueron los autores de los tantos y se vio una gran actuación del arquero Jeremías Ledesma. Con el empate —y un marcador global de 3 a 2 en la serie— el club de Arroyito se consagró campeón provincial por primera vez en su historia.
En mayo de 2018, el club vio el regreso de Edgardo Bauza como técnico de Central en su segundo ciclo.
Una de sus primeras frases al mando del conjunto auriazul fue: «No conozco otro objetivo que no sea salir campeón con Central». En treintaidosavos de final, el conjunto auriazul enfrentó a Juventud Antoniana con un resultado favorable de 6-0. Luego, tanto en dieciseisavos como en octavos de final, el canalla empató ambos partidos: el primero sin goles contra Talleres, avanzando por penales 5 a 3. En octavos de final, el club de Arroyito igualó 1 a 1 frente a Almagro y lo derrotó 5 a 4 en los tiros desde el punto penal.
En cuartos de final, Central y Newell´s protagonizaron un nuevo clásico rosarino. Como en las ediciones de 1969 y 1970, los auriazules derrotaron nuevamente a su máximo rival y avanzaron a semifinales con goles de Herrera y Zampedri, con descuento de Torres para Newell´s.
Central se enfrentó a Temperley por las semifinales. El partido terminó empatado 1-1 luego de un gol de los celestes en los últimos minutos del partido. Sin embargo, los canallas vencieron finalmente en los penales 4-2, clasificándose para su cuarta final de Copa Argentina.
La final de la copa se disputó el 6 de diciembre en el estadio Malvinas Argentinas de Mendoza ante Gimnasia y Esgrima de La Plata. En esta final, ambos equipos buscaban terminar con rachas de más de veinte años sin festejos. Central ganaba durante el primer tiempo con gol de Zampedri, pero en el segundo tiempo Lorenzo Faravelli puso el empate. La igualdad se mantuvo durante los noventa minutos, y se forzó la definición por penales. Allì, los rosarinos anotaron cuatro y Gimansia solo uno —previamente había desviado uno y otro había sido detenido por el arquero Jeremías Ledesma—, lo que hizo a Central campeón de la Copa Argentina por primera vez en su historia. Además, le dio la clasificación a la Copa Libertadores 2019 y a la Supercopa Argentina 2018.
Plantel campeón: Jeremías Ledesma, Josué Ayala, Miguel Barbieri, Matías Caruzzo, Óscar Cabezas, Marcelo Ortiz, Alfonso Parot, Elías Gómez, Gonzalo Bettini, Nahuel Gómez, Diego Arismendi, Leonardo Gil, Joaquín Pereyra, Néstor Ortigoza, Andrés Lioi, José Luis Fernández, Washington Camacho, Federico Carrizo, Maximiliano Lovera, Fernando Zampedri, Marco Ruben, Agustín Maziero y Germán Herrera.
Entrenador: Edgardo Bauza
Al 2021, Rosario Central tiene 24 participaciones internacionales oficiales. Cuenta con un récord que mantuvo hasta 2005 en donde no había perdido en su estadio ningún partido contra un equipo de otro país, acumulando un invicto de 41 encuentros, con 31 triunfos y 10 empates.SC Internacional de Brasil, por la Copa Sudamericana 2005, al caer por 1 a 0.
El mismo se cortó contraLos auriazules han estado presentes en 12 ediciones de la Copa Libertadores de América, siendo el séptimo, en número de participaciones en dicho torneo. Vale agregar que en la tabla acumulada de puntos de este certamen, los auriazules ocupan el octavo puesto entre los equipos argentinos.
Por torneos internacionales, se enfrentó a su clásico rival en dos competiciones, habiéndolo eliminado en las dos oportunidades. En total, sobre 5 encuentros, Central ganó 2 y empató los 3 restantes, manteniendo el invicto por torneos internacionales sobre los leprosos.
Actualizado al Campeonato de Primera División 2019-20.
El Clásico Rosarino, la rivalidad entre Rosario Central y Newell's, cuenta con una rica trayectoria, que comenzó el año 1905 cuando se enfrentaron por primera vez en la historia, con victoria de los rojinegros por 1 a 0. A lo largo de la historia, se han realizado decenas de estos encuentros abarcando diferentes instancias como: Liga Rosarina de Fútbol, Asociación Rosarina de Fútbol, torneos nacionales de AFA, copas nacionales e internacionales de CONMEBOL, y encuentros amistosos.
No existe un registro oficial sobre el total de los clásicos a lo largo de los más de 100 años de enfrentamientos, por lo que es habitual encontrar diferentes fuentes que intentan reflejar las instancias de cruce. Una fuente que intenta recopilar la totalidad de los mismos es el sitio web Fútbol de Rosario, que en diciembre de 2007 hizo un recuento histórico del clásico, desde 1905 hasta aquel 2007.
Dos fuentes que intentan recopilar la totalidad de los resultados son dos publicaciones del Diario La Capital, una del año 2007, y la otra de 2008.
Otra fuente que intenta recopilar los mismos es la del sitio web PromiedosAFA —1939 hasta el día de hoy— pero no incluye los referidos a copas nacionales de AFA ni a los pertenecientes a copas internacionales oficiales de CONMEBOL.
donde detalla solo los clásicos oficiales disputados en Primera División desde el comienzo de los torneos nacionales deLa fuente que intenta recopilar todos los clásicos oficiales y amistosos desde 1905 al presente es la de Goal.com, en donde se incluyen los cotejos referidos a la Liga Rosarina de Fútbol, Asociación Rosarina de Fútbol, Federación Santafesina de Fútbol, Asociación del Fútbol Argentino, y CONMEBOL. A 2019, Rosario Central lleva la delantera en el historial del clásico.
Al día de hoy Central aventaja por dos a Newell´s (11 a 9) en cuanto a la suma total de títulos nacionales e internacionales oficiales en toda la historia.Primera división, 6 Copas nacionales oficiales de AFA, y 1 copa internacional oficial organizada por la Confederación Sudamericana de Fútbol. Por su parte, los rojinegros del Parque de la Independencia cuentan con 6 Ligas de Primera división, y 3 Copas nacionales oficiales de AFA.
Los auriazules de Arroyito poseen 4 Ligas deRecopilando los datos publicados en «Historia en Azul y Amarillo», suplemento editado por el Diario La Capital de Rosario en 2010 —y que tiene su correlato en «Historia en Rojo y Negro»—, cuyo autor es el reconocido estadígrafo del fútbol rosarino Carlos Durhand, con la colaboración de Javier Parenti y Víctor Khury, se desprenden los siguientes números—se incorporan los resultados de los partidos posteriores a 2010.
(*) Dentro del total se incluyen 4 encuentros disputados por la Copa Pinasco de 1905 y 1906 que corresponden a partidos de Segunda división rosarina,Atlético del Rosario y Rosario Central participaban del Torneo o Copa Competencia contra clubes de Buenos Aires y Uruguay, siendo esta su primera división. La LRF decidió en una de sus primeras reuniones que de la Copa Pinasco no podrían participar aquellos jugadores que estuviesen disputado la Copa Competencia que organizaba la Asociación Argentina de Fútbol, lo cual disminuyó las chances de Central, que participaba con su primer equipo en esta copa nacional y debía poner a su segundo equipo en la Copa Pinasco.
dado que entre el año 1900 y 1907, los clubes(**) La AFA les dio 2 encuentros perdidos a ambos, debido a incidentes.
*Actualizado hasta diciembre de 2020
La paridad en este clásico es tan notoria que a lo largo de la historia Rosario Central aventaja por 9 títulos a Newell's Old Boys (34 a 25). Hay que aclarar, que hay 3 títulos de Rosario Central, que pertenecen a la Federación Rosarina (1913) y a la Asociación Amateurs (1920 y 1921), que fueron 2 ligas disidentes a la Liga Rosarina de Fútbol, pero esos títulos son oficiales, dado que cuentan con el aval de la AFA. Tanto la Federación Rosarina de Football como la Asociación Amateurs de Football de Rosario son Ligas no oficializadas por la Asociación Rosarina de Fútbol, pero son reconocidas por la AFA, dado que las instituciones disidentes de Rosario estaban afiliadas a asociaciones que la propia entidad madre reconoce como sus antecesoras: la Federación Argentina de Football por un lado, y la Asociación Amateurs Argentina de Football, por el otro.
Además, no se tienen en cuenta los títulos de la Copa Santiago Pinasco de los años 1905 y 1906, por ser considerados de Segunda división. Tampoco se tiene en cuenta el Torneo Apertura 1990 obtenido por Newell's Old Boys, ya que este fue un torneo clasificatorio para disputar una final anual de la temporada 1990-91 entre el vencedor del Apertura 1990 versus el del Clausura 1991. A este tema —que habría un único campeón en la temporada—, la AFA lo había pautado desde antes del inicio del Apertura 1990, por ende, el máximo organismo rector del fútbol argentino no le otorgó el rotulo de campeón a Newell's por el Apertura de aquel año.
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