La plaza del Triunfo de la ciudad española de Sevilla se encuentra situada en el eje de un conjunto de edificios declarados Patrimonio de la Humanidad en 1987: el Archivo General de Indias, el Real Alcázar de Sevilla y la catedral de Sevilla.
El nombre de dicha plaza se debe a un templete de estilo barroco situado al costado del Archivo de Indias, llamado templete del Triunfo de Nuestra Señora del Patrocinio, con una imagen de la Virgen y el Niño en su interior, y construido en el año 1756.
El motivo fue que, el 1 de noviembre de 1755, durante la celebración de la misa de Todos los Santos se produjo el terremoto de Lisboa de 1755, que se sintió no solo en la ciudad portuguesa, sino también en algunas ciudades españolas. Los fieles salieron del templo catedralicio para terminar la misa en el exterior, sin que se produjeran daños personales, y en ese lugar se levantó ese templete al Triunfo.
Frente a este templete se encuentra otro monumento dedicado a la Inmaculada Concepción, cuyo conjunto escultórico se debe a Lorenzo Coullaut Valera, levantado en 1918, en el que todos los años la noche del 7 de diciembre se realiza una ofrenda floral, así como un recital de tunas universitarias, que congrega a un gran número de personas. El monumento a la Inmaculada tiene cuatro estatuas de personajes sevillanos ilustres que fueron firmes defensores del inmaculismo en el siglo XVII: Bartolomé Esteban Murillo, Miguel Cid, Martínez Montañés y Juan de Pineda.
Además de los edificios mencionados también se encuentra otros significativos: la Casa de la Provincia, antiguo hospital del Rey y el convento de la Encarnación.
Esa zona se incorporó a la ciudad durante la época del reino Taifa de Sevilla. Durante el dominio almohade una parte de los terrenos que comprendían la plaza se incorporaron al Alcázar. Al comenzarse la construcción de la catedral, en el siglo XV esta plaza se conocía con el nombre de plaza de los Cantos debido a que era el lugar de acopio de los cantos y sillares para la construcción del templo que se estaba ejecutando durante todo este siglo. Así mismo durante los siglos posteriores se le denominaba como plaza del Hospital del Rey.
En el siglo XVIII se derriban los arcos de Santa Marta y de la Casa de la Contratación y se construye el monumento del Triunfo. En el comienzo del siglo XX se coloca el monumento a la Inmaculada y se ajardina la plaza.
Inmaculada de Lorenzo Coullaut Valera
Plaza con el monumento a la Inmaculada y el templete al Triunfo al fondo, junto al Archivo de Indias
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