Municipios Autónomos Zapatistas
Los Autodenominados Municipios Autónomos Rebeldes Zapatistas (MAREZ) son pequeños territorios bajo control de las bases de apoyo zapatistas en el estado mexicano de Chiapas, declarados en diciembre de 1994. El EZLN como estructura militar dice no mantener una participación en dichos espacios de "auto gobierno", pues dicen que en sus principios no está la toma del poder, por lo que ningún mando o miembro del "Comité clandestino revolucionario indígena" puede ocupar cargos de autoridad o gobierno en estos espacios.
Estas localidades, se encuentran dentro de los municipios oficiales, varias incluso dentro del mismo municipio como en el caso de San Andrés Larrainzar y Ocosingo. Los MAREZ se coordinan mediante Consejos Autónomos y sus principales objetivos han sido promover la educación y la salud en sus territorios. También lidian con problemas de tierras, trabajo y de comercio, ven asuntos de vivienda y alimentación, promueven la cultura (sobre todo, la lengua y las tradiciones) y también se encargan de administrar justicia.
Un grupo armado, formado en su gran mayoría por indígenas del sur de México en Chiapas, se rebelaron en 1994, parcialmente en respuesta a la firma del NAFTA o Tratado de Libre Comercio de América del Norte, reclamando sus tierras en lo que llamaron la "guerra contra el olvido" del Ejército Zapatista de Liberación Nacional. Establecieron así varias localidades en rebeldía que operan aparentemente fuera de la ley mexicana y en los que se tiene como objetivo el desarrollo local entre comunidades.
Desde el 2003 los MAREZ se coordinan en agrupaciones más pequeñas denominadas caracoles. Antes de esa fecha en que se implementaron los caracoles, Los neozapatistas utilizaron el título de "aguascalientes" para nombrar al lugar donde se realizó la Convención Nacional Democrática el 8 de agosto de 1994, convocada por el EZLN, este nombre se le dio en alusión al lugar donde se llevó a cabo la alianza de los ejércitos de Emiliano Zapata y Francisco Villa en 1914.
Fuente: Hidalgo, Onésimo y Castro Soto, Gustavo. Cambios en el EZLN. CIEPAC, 2003.
Según los simpatizantes del movimiento, las leyes o normativas en las Municipalidades Autónomas Zapatistas o Municipios Autónomos Rebeldes no son pasadas por autoridades, sino por "Juntas de Buen Gobierno" que intentan formar un gobierno participativo mediante la coordinación de los representantes de las comunidades. En varias comunidades, las asambleas generales se hacen por duración de una semana para decidir en varios aspectos concernientes a la comunidad. Las asambleas están abiertas a todos, sin una burocracia formal. Las decisiones hechas por las comunidades luego son pasadas a delegados electos cuyo trabajo es entregar la decisión como información a una junta de delegados. Los delegados pueden ser revocables y son también rotativos. De esta manera, se pretende que la mayor cantidad de gente esté en posibilidad de expresar sus puntos de vista.
Los neozapatistas no proclaman adherir a una ideología política específica más allá del izquierdismo. Sin embargo, el funcionamiento de los MAREZ marca algunas diferencias programáticas con respecto de la izquierda tradicional, reivindicando el indigenismo de inspiración zapatista y magonista con aportaciones del socialismo autogestionario, el marxismo autónomo y el anarquismo.