Las acusaciones por abuso infantil contra Michael Jackson durante 1993 son las primeras que caen sobre él por parte de Evan Chandler, el padre de uno de sus bailarines infantiles de 13 años, Jordan, quien además residía en su rancho de Neverland.
La relación entre Jackson y Jordan había comenzado en mayo de 1992; Chandler inicialmente dio la bienvenida y alentó esta amistad, y se jactó de su conexión con una celebridad. La amistad llegó a ser reconocida, pues los medios del tabloide divulgaron que Jackson se había convertido en un miembro de la familia Chandler. En 1993, Chandler se enfrentó a su exesposa June, que tenía la custodia de Jordan, con las sospechas de que su hijo había mantenido una relación inapropiada con Jackson, pero June descartó las preocupaciones de éste. Según varias fuentes, Chandler amenazó con hacer pública la evidencia que afirmaba tener sobre Jackson, quien le pidió a su abogado Bert Fields que interviniera. El abogado de Chandler, Barry K. Rothman, llamó al psiquiatra Mathis Abrams y reportó una situación de abuso sexual que reflejaba lo que su hijo había denunciado. En consecuencia, Abrams envió a Rothman una carta el 15 de julio indicando que existía una “sospecha razonable” de abuso sexual y, si se diera el caso de que fuese un caso real, se le requeriría por ley ponerse en contacto con el Departamento de Servicios para Niños del Condado de Los Ángeles (DCS). El 4 de agosto, Chandler y Jordan se reunieron con Jackson y Anthony Pellicano, el investigador privado de Jackson, y Chandler leyó la carta de Abrams. A continuación, se abrió las negociaciones para resolver el problema con un acuerdo financiero. El 16 de agosto, tres días después de que Chandler y Rothman rechazaran una oferta de 350.000 dólares del campamento de Jackson, el abogado de June le notificó a Rothman que presentaría los documentos judiciales necesarios la mañana del día siguiente para forzar a Chandler que mandase a Jordan de vuelta para así permitirle ir a la etapa asiática del Dangerous World Tour de Jackson.
El día en que Jackson comenzó la tercera etapa de su gira, las noticias de las acusaciones se divulgaron al público y recibieron la atención de los medios de comunicación de todo el mundo. Finalmente, Jackson canceló el resto de la gira debido a los problemas de salud derivados del escándalo. En enero de 1994, Jackson llegó a un acuerdo financiero de 23 millones de dólares con los Chandler para resolver el asunto y en septiembre se dio por concluida la investigación del delito.
Aunque algunas personas perciben el acuerdo como una admisión de culpabilidad, el acuerdo de conciliación estableció específicamente que Jackson no admitió ningún delito ni responsabilidad y legalmente, un acuerdo no puede utilizarse como evidencia de culpabilidad en futuros casos civiles y penales. El pago del acuerdo fue "por presuntas lesiones personales derivadas de demanda por negligencia y no por demanda de actos intencionales o incorrectos de abuso sexual",ya que Jackson se presentó a todas las sesiones del juicio para así mostrar su inocencia. En el acuerdo, ambas partes acordaron que no hablarían sobre los detalles del caso en público, pero esto no detendría a los Chandler de testificar en un juicio penal o de que compartieran información con las autoridades en una investigación delictiva futura. El documento del acuerdo declara firmemente que no hay admisión de irregularidades por parte de Jackson ni la admisión de abuso o inmodestia y que bajo ninguna circunstancia se retendrá ningún pago a los demandantes, incluso si fueran a declarar contra Jackson. El abogado de los Chandler, Larry Feldman, declaró explícitamente que "nadie compró el silencio de nadie".
Hay rumores que dicen que tras la muerte de Jackson, el 30 de junio de 2009, Jordan admitió que había mentido acerca del supuesto abuso que el cantante había cometido contra él, y que todo fue un plan de su padre para salir de la pobreza mediante el dinero de Jackson, pero esta información es falsa. Lo que sí es cierto es el hecho de que, una compañera de universidad de Jordan dice que éste decía que según sus palabras "Jackson no era capaz de hacer algo así". Con esta información se deduce que la denuncia interpuesta en el año 1993 es falsa.
El 5 de noviembre de 2009, Evan se suicidó en su apartamento en Jersey City, Nueva Jersey, a los 65 años.
Mucha más información sobre el caso fue recopilada en el documental Square One.
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